Desde que llegué a Japón, había oído hablar el hanami, y de la pasión que sienten los japoneses hacia las flores de cerezo 桜 (sakura). Y este fin de semana llegó el momento de comprobar por mi mismo el porqué de tanta fascinación. Y tengo que reconocer que no les falta razón, es un espectáculo fascinante ver todos los cerezos cubiertos de flores, hay tantas que parecen nevados. Os pongo unas fotos para que lo veáis por vosotros mismos, espero que os gusten.
Últimamente tenía la impresión de que no salía en ninguna de mis fotos, así que
me he propuesto cambiarlo. Y de paso os dejo un recordatorio para los que hayáis
olvidado de mi cara :P
Por cierto un comentario sobre las mascarillas blancas que llevan muchos japoneses. No son para no coger enfermedades (o al menos no lo son en la mayoría de los casos). En realidad hay veces que se la ponen cuando están enfermos, para no contagiar a otros; pero principalmente se la ponen para reducir los efectos de la alergia, que aquí en Japón afecta a una gran parte de la población (¡¡¡y yo no estoy entre esos!!!, es el primer año que de momento, no he notado nada de alergia ^_^).